Van dos intentos tratando de actualizar el blog, esperemos que este se dé mejor. Hace tiempo quise escribir sobre El Castigo, la tv movie que Antena 3 emitió el pasado lunes y martes. La verdad es que me aterroriza el hecho de que esté inspirado en hechos reales. En pocas palabras, la película trata sobre una granja escondida en medio de la montaña, en la que tratan de ’reeducar’ a chavales ma críados. El problema está en los métodos que utilizan, algo pasaditos de tono. Empieza muy fuerte, con un guión bastante enganchador, pero poco a poco va perdiendo fuerza. Suerte que el final no me decepcionó, ya que tenía toda la pinta de hacerlo... Recomendación hecha.
Por otra parte, el miércoles empezaron mis vacaciones navideñas. Y empezaron de la mejor manera posible. Lo que en un principio iban a ser unas cañas de despedida, se convirtieron en un tapeo improvisado, en una comilona abundante, y finalmente en varias copas de pacharán y licores. No hay nada como una conversación natural, fluyente, divertida, interesante y muy, muy sexual, entre seis personas que se complementan a la perfección. Hacía mucho tiempo que no me sentía tan a gusto hablando de todo y de todos. Espero que haya un tapeo igual o parecido a la vuelta de vacaciones.
Y digo que mis vacaciones comenzaron el miércoles porque el jueves no tuve clase. En mi universidad, UCJC, le dieron la medalla de oro a Jesús Neira, el profesor de la ucjc que sufrió una paliza por defender a una mujer que estaba siendo maltratada (la guarra de Violeta Gil). Al acto acudieron, entre otros, la Presidenta de la Comunidad de Madrid Esperanza Aguirre, el Presidente del Senado Javier Rojo, la ministra de Igualdad Bibiana Aído (tan simpática y natural, pero con un volumen voz algo elevado), y la mujer del profesor Isabel Cepeda. Fue un acto bonito, directo y sincero. Si os interesa, podéis verlo aquí.
Con la excusa de no tener clase el viernes, otra vez pude volver a salir un jueves de fiesta, mi día favorito. Aunque este jueves no fue como el resto. No lo fue por varios motivos: lo primero no sabría decir si había más o menos gente de lo normal, mucha gente no tenía clase al día siguiente, pero otra mucha también había vuelto a sus ciudades natales. Además por fin logré superarla vergüenza e integrarme un poco con la gente de Angelina Beautiful, que siempre es ella la que viene con mis amigos (parecemos una pareja). Bebimos en Leganitos, pero esta vez no ’Leganitos 23 Flexiclub’, sino un parquecito al aire libre. La verdad es que estuvo divertido, y si no hubiera sido por el llenazo total del Club 7, hubiera sido perfecto. Pero emigré rumbo a Astoria (véase Nasti). ¿Cuál era el problema? Llenazo total de nuevo. Así que optamos por Polana. ¿Problema? Llenazo y estafa que nos querían meter. Hay que ver cómo están las discotecas con el tema del aforo desde el caso Ussía... Finalmente optamos por ir a casa de Davgalizan, e improvisar ahí un after con música muy muy variada y momentos inclasificables.
El viernes me entró el sentido de la responsabilidad, y pese a tener la mansión exclusivamente para mi libre albedrío, decidí quedarme en casa y disfrutar de un clásico que tenía ganas de ver, ’Vicky Cristina Barcelona’, del maestro Allen. Buenas interpretaciones, pero guión algo pobre. Es todo lo que diré. Y el sábado, como viene siendo normal tras pasar un día entero en casa, el dolor de cabeza me empujó lo antes posible a la calle. Así que antes de beber y ’elastiquear’, me fuí de cena con el puto de Salvador (no tiene otro nombre) y la gran y adorable Bea. El individuo en cuestión me tuvo esperando nada más y nada menos que 45 minutos en la Gran Vía madrileña. Tiempo en el que descubrí lo variada y peculiar que es la fauna autóctona. Entre otras cosas cabe mencionar cómo una pandilla de frikis, llamésmosles así, preparó unaactuación. Se divieron en dos grupos: por un lado se fue uno de ellos, uno con la cabeza bañada en agua oigenada, y por el otro el resto, unas siete personas a ojo. Mi estupefacción legó al oir unos gritos de fan histéricos, véase la panda de siete frikis, gritando y corriendo hacía el tío de la cabeza bañada en agua oxigenada. ¡Estaban haciéndose pasar por seguidores incondicionales y por un tal Christian del grupo Rebelde! Sin palabras el numerito que montaron. ¿Qué sentido puede tener hacer eso? ...
El caso es que cuando el señor Salvador se dignó a aparecer, fuimos con Bea a cenar al Vips. Fuimos al Vips, había mucha cola. Fuimos al otro Vips, había mucha cola. Pensamos en ir al Vitamina, había mucha tercera edad. Así que tras una larga indecisión acabamos en el Cañas y Tapas. Una cena no muy digna de la Casa Real podríamos decir, pero entretenida. Como siempre que quedo con estos personajes. Después de una mini ruta por Malasaña, les dejé y corrí al auxilio de mi botella de ron Barbieri Hills. Fue un botellón de los de antes, con mi gente: Pablo, Andrea y Axel. Además ví a mucha gente que echaba de menos, como Curro, Henkes o Marta Cañizares. Finalmente un Elástico, el último del 2008, en encuentro largo, bonito y esperado con un vallisoletano.
Y hoy... ¡ay hoy! Gracias al buen consejo del vallisoletano en cuestión, he tenido el valor de dormir tan sólo un par de horas para pegarme el viaje hasta Navalcarnero, hacer unas cuantas fotografías y una mini-entrevista, para un reportaje del Diario Informaciones. El tema es apasionante: I Concurso de Escaparates Navideños. Me van las emociones fuertes.
Con su permiso, y tras este nada breve repaso a estos cuatro últimos días de mi vida, me voy a descansar, que me lo tengo merecido.